La ministra de Desarrollo e Inclusión Social y vicepresidenta de la República, Dina Boluarte, expresó su solidaridad con los periodistas de Cuarto Poder que fueron secuestrados el día de ayer por rondas campesinas que defienden al sindicado Pedro Castillo.
En sus redes sociales, la funcionaria indicó que pidió que se investigue este lamentable hecho, que viola flagrantemente la libertad de expresión.
“Mi solidaridad con los periodistas retenidos hoy en Cajamarca. Las rondas campesinas son colectivos que forman parte de la justicia especial, reconocidas por la Constitución, y no pueden afectar derechos como la libertad de expresión o la libertad de las personas”, escribió.
“El Estado de derecho garantiza la libertad de prensa y por ello esperamos una investigación sobre este lamentable incidente”, señalo. Ya que el secuestro en nuestro país tienen una condena no menor de 20 años ni mayor de 30.
Cabe indicar que el secuestro de los ronderos buscaba que los periodistas afirmaran en vivo que es falso todo lo informado el último domingo en el reportaje que denuncia tráfico influencias por parte de la cuñada del presidente Castillo, Yenifer Paredes.
Comunicado de América de Televisión
“La tarde del miércoles 6 de julio un equipo del programa Cuarto Poder integrado por el reportero Eduardo Quispe, el camarógrafo Elmer Valdiviezo y un conductor de la zona, fue secuestrado por integrantes de las rondas campesinas del distrito de Chadín, provincia de Chota, en la región Cajamarca”, señala el pronunciamiento del canal de televisión.
Se agregó que los ronderos les quitaron la cámara y los celulares, y los obligaron a pedir disculpas en televisión nacional por el reportaje sobre la hermana de la Primera Dama emitido en Cuarto Poder el último domingo. “Si eso no ocurría, les advirtieron que sus vidas estaban en riesgo”, añade América TV.
“Ante esta situación, y para proteger la integridad de las personas secuestradas, se interrumpió la programación de América TV para que el reportero Eduardo Quispe leyera una declaración cuyo contenido fue dictado por los ronderos, quienes, como dijimos, lo obligaron a leer. Solo serían liberados si se cumplía con esta exigencia, lo que ocurrió momentos después de la transmisión”, precisó la casa televisora.
