La sociedad civil organizada con autoridades, servidores públicos y privados, escolares y ciudadanos de los distritos de Chimbote, Nuevo Chimbote y Coishco, en la zona costera de Áncash, participaron activamente en el simulacro de un sismo de 8.5 grados seguido de tsunami que dejó como saldo 2,410 muertos y 1,451 desaparecidos.
Este ejercicio preventivo tuvo por finalidad conocer cuánto estamos preparados para afrontar un movimiento telúrico de gran magnitud.
A las 10:00 a.m. empezaron a sonar las alarmas de emergencia y enseguida se puso en ejecución el simulacro. En el centro de Chimbote abandonaron edificios, viviendas, negocios y colegios, todos empezaron a caminar con dirección al jirón José Olaya, donde se considera que el tsunami no llegaría con efecto destructor.
En esta oportunidad se percibió gran participación de trabajadores de las instituciones públicas, privadas y Policía Nacional; además escolares quienes formaron círculos de seguridad a medida de prevención.
Las autoridades se trasladaron hasta el Hospital III de EsSalud, donde se brindó el reporte oficial de la afectación ocasionada por este movimiento telúrico a los integrantes del Centro de Operaciones de Emergencia Local (COEL).
El secretario técnico provincial de Defensa Civil, Luís Giancarlo Ventura Vásquez, saludó la participación de la población chimbotana durante este ejercicio de simulación, al recordarse los 49 años del devastador terremoto ocurrido en el año 1970, en la región Áncash.
El funcionario dio a conocer que un fenómeno de esta naturaleza dejaría solo entre Chimbote y Nuevo Chimbote 76 mil 361 personas damnificadas, 2 mil 407 muertos, 8 mil 830 heridos y mil 436 desaparecidos.