La Policía Nacional ha detenido este martes a siete personas por su presunta implicación en dos casos de racismo contra el delantero brasileño del Real Madrid Vinicius Júnior. Tres de ellos son jóvenes de entre 18 y 21 años que le profirieron insultos en el estadio del Valencia el pasado domingo. Los otros cuatro son hombres de entre 19 y 24 años que colgaron un muñeco con su camiseta en un puente cercano a la Ciudad Deportiva del club blanco a finales de enero.
Los tres primeros fueron identificados gracias a las imágenes captadas por las cámaras de seguridad del estadio de Mestalla durante el partido de LaLiga Santander entre el Valencia CF y el Real Madrid. Según la Policía, a los detenidos se les atribuye un delito relativo al ejercicio de los derechos fundamentales y las libertades públicas.
La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, ha calificado lo ocurrido como “lamentable y condenable incidente” y ha destacado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado “están trabajando desde el momento en el que se produjo el incidente”. Asimismo, ha anunciado que el Consejo Superior de Deportes se pondrá a trabajar con La Liga y la Federación de Fútbol para poner en marcha una campaña contra el racismo en los campos de fútbol.
Los otros cuatro detenidos son presuntos autores de un delito de odio por haber colgado un muñeco hinchable con la camiseta de Vinicius en un puente próximo a la Ciudad Deportiva del Real Madrid horas antes de un partido entre el conjunto blanco y el Atlético de Madrid por la Copa del Rey que se disputó el 26 de enero. Tres de ellos están vinculados al grupo ultra Frente Atlético y el cuarto es hijo de un guardia civil.
La Policía Nacional ha podido identificarlos gracias a la denuncia presentada por LaLiga ante el Juzgado de Instrucción nº 28 de Madrid, a la que se acompañaba un informe de su departamento de integridad y seguridad, en el que ya se apuntaba indiciariamente la responsabilidad de algún individuo concreto.
El muñeco hinchable que vestía la camiseta del futbolista del Real Madrid apareció colgado de un puente la mañana del pasado 26 de enero, fecha en la que se disputó el derbi madrileño de cuartos de final de la Copa del Rey. Junto al muñeco se exhibía una pancarta de dieciséis metros de longitud en la que se podía leer “Madrid odia al Real”.