Con baños de florecimiento, flores amarillas en casa, piñatas de Pedro Castillo, Melissa Paredes y Vladimir Cerrón, los peruanos se preparan para despedir el 2021 y dar la bienvenida a un 2022 en medio de restricciones impuestas por el gobierno por la presencia de la variante Ómicron en el país.
Los centros comerciales del Cercado de Lima, como Mesa Redonda y Calle Capón, se muestra abarrotado de gente que buscan llevar desde gorros, lentes, guirnaldas, piñatas y otro cotillón para recibir el 2022 a lo grande.
Otras decenas de personas hacen largas filas para realizar el ritual de baño de florecimiento en la tradicional feria Los Deseos, donde 20 “yatiris” (médicos y curanderos aymaras de Perú y Bolivia) les pasan flores amarillas, plumas de cóndor y huevos de avestruz por el cuerpo para empezar bien el nuevo año.
“Con los baños de florecimiento la gente levanta su aura y energía para empezar bien el año”, dijo Lidia Cortez, coordinadora de la Feria de los Deseos, que se realiza en la plaza Manco Cápac, en Lima.

“La gente pide salud en estos tiempos de covid y abundancia para el próximo año”, agregó Cortez vestida con traje andino.

Los curanderos también se dedican a ganarse unas monedas prediciendo el futuro.

La lectura del futuro se hace con hojas de coca, la mítica planta andina de tiempos del imperio inca y a la que se le atribuyen propiedades vigorizantes.
Como parte del negocio, se venden “alasitas”, objetos en miniatura que simbolizan los deseos de quienes las adquieren. Esas miniaturas cuestan cinco soles (unos 1,2 dólares).

Debe estar conectado para enviar un comentario.