Pese a la cuarentena dispuesta por el gobierno para frenar la segunda ola de contagios de Covid-19, un grupo de pastores evangélicos salieron a las calles a predicar sin colocarse adecuadamente su mascarilla, exponiendo así a la ciudadanía y a ellos mismos.
Los religiosos llegaron hasta los exteriores del Hospital de San Juan de Lurigancho para predicar la palabra de Cristo, pese a las prohibiciones por el estado de emergencia y la cuarentena.
En las imágenes difundidas por ATV Noticias, se aprecia a los hombres predicando con la mascarilla debajo de su boca. Incluso uno escupe al hablar, lo que es gravísimo ya que podría contagiar a las personas de coronavirus en caso portara el virus.
Ante la situación, el periodista le pidió al sujeto que se coloque bien su mascarilla; sin embargo, la respuesta del pastor lo deja atónito.
«Es un protocolo y por eso me lo pongo, pero en sí lo que me salva es la sangre de Cristo», se excusa el hombre.
«Estoy predicando la palabra nada más. Amén, amén», asegura. Pese a que el reportero le explica el riesgo que implica colocarse mal la mascarilla, tanto para él como para las personas que transitan por el lugar, el sujeto no entiende razones.
«Yo estoy bañado con la sangre de Cristo y la sangre de Cristo tiene poder. (Uso la mascarilla) por el protocolo no más, no es por otra cosa», señala.
Autoridades del hospital reportaron esta peligrosa situación a la policía para que ambos predicadores sean retirados del lugar y no se les permita realizar este tipo de actividades.