Gran cantidad de personas decidió acudir este domingo al terminal pesquero de Chorrillos para poder disfrutar de una tarde de verano, sin importar el riesgo de contagiarse por COVID-19.
Como se recuerda, el Gobierno indicó que hasta el 17 de enero se encontraba totalmente prohibido el acceso a las playas; sin embargo, decenas de veraneantes hicieron caso omiso a esta norma y burlaron a la Policía que rodeaba el lugar.
«Evaluamos que las playas podían ser un potencial espacio de contagio si estamos al aire libre, en grupos, consumiendo alimentos y tomando bebidas. Se descuida el uso de la mascarilla y el distanciamiento físico», indicó la presidente del consejo de ministro, Violeta Bermúdez.