El padre de familia Melquiades Ataucusi Quispe, de unos 26 años, quien regresaba a su domicilio ubicado en la Picota fue asaltado por dos delincuentes extranjeros de nacionalidad venezolanos, quienes después de robarle sus pertenencias le clavaron varias puñaladas en el corazón.
Su cuerpo fue encontrado el domingo 7 de mayo, por la mañana en el parque que se ubica al frontis del grifo Ayacucho, desde donde salen vehículos hacia la ciudad de Lima.
Comerciantes y transportistas que pernoctan por el lugar hallaron al joven tendido en el suelo bañado en un charco de sangre. En un primer momento, pensaron que estaba mal herido, pero minutos después comprobaron que había fallecido tras ser atacado con un arma punzo cortante.
En esta parte de la ciudad llegaron a vivir gran cantidad de venezolanos quienes causan zozobra en los alrededores de Emadi, pista nueva Nery García, vía libertadores Av. Del deporte, hospital y sectores aledaños.
Hasta el lugar se constituyó personal policial de la Divincri – Ayacucho, para iniciar con las diligencias preliminares. Luego en coordinación con el representante del Ministerio Público, realizaron el levantamiento del cadáver. Vale precisar que no es la primera vez en que suceden este tipo de hechos lamentables por la zona. Uno de los últimos casos se dio con otro joven, quien era buscado por el delito de feminicidio.
Los delincuentes venezolanos se desplazaban en una moto lineal de color Azul, quienes rondan por estos sectores causando miedo a la población de salir de sus domicilios. Los vecinos señalan que no existe seguridad ciudadana, el personal de serenazgo brilla por su ausencia.
La PNP a los deudos de Melquiedez Ataucusi que no tendrían vehículos y menos combustibles para realizar las investigaciones sobre el crimen perpetrado por los venezolanos.
Melquiedez Ataucusi Quispe, deja en la orfandad a un niño de 10 años de edad y una viuda, que lamenta y llora el asesinato de su pareja a manos de delincuentes venezolanos, quienes llegaron a causar terror a la provincia de Huamanga.