Un sujeto identificado como Ibrahim E. Bouaichi, quién tenía poco tiempo de salir de prisión por la pandemia del coronavirus, asesinó a su expareja venezolana Karla Domínguez a través de varios disparos, en represalia por haberlo enviado a la cárcel tras, presuntamente, haber abusado sexualmente de ella.
Según The Washington Post, el hombre fue liberado por las autoridades de Virginia, de EE. UU., pese a contar con antecedentes de violación, estrangulamiento y violación en contra de su víctima ; sin embargo, dada la situación provocada por la pandemia del coronavirus, se estableció que debía cumplir arresto domiciliario tras pagar una fianza de 25,000 dólares.
Según fuentes policiales, el convicto abandonó su vivienda el 29 de julio con un arma de fuego y se dirigió a la vivienda de su expareja, donde finalmente la asesinó.
Tras ello, el hombre permaneció por varios días prófugo de la justicia, hasta que fue encontrado en el condado de Prince George, luego de númerosos operativos. Una vez realizada la intervención, el sujeto se habría disparado con la intención de volver a la cárcel; sin embargo, este no perdió la vida u fue trasladado a un centro médico, donde permanecería con pronostico reservado.