Este lunes, autoridades sanitarias de Chile, retiraron la cuarentena obligatoria durante los fines de semana. De esta forma, cinco barrios de Santiago avanzan en la reapertura de economía; mientras que, la segunda ola se recrudece en el norte y sur del país.
Las Condes y Vitacura pasarán el próximo jueves a la tercera fase de las cinco estipuladas en el plan de apertura del Gobierno, junto a las residenciales Maipú y Lo Barnechea.
En la tercera fase del plan, en la que ya se encuentran otros extensos barrios de la capital como Ñuñoa, Peñalolén y La Reina, hay libre circulación los sábados y los domingos y pueden abrir los negocios que no sean de primera necesidad.
Chile lleva desde diciembre sumido en una segunda ola, con cifras de nuevos casos diarios que se asemejan a las del primer gran pico de la pandemia de junio y julio.
Para frenar la pandemia, las autoridades decidieron a mediados de diciembre establecer una cuarentena obligatoria durante los fines de semana en la capital, una medida que aún estará vigente en el centro de la ciudad y varios barrios periféricos.
“La Región Metropolitana -a la que pertenece Santiago- afortunadamente se mantiene estable, con una pequeña caída del 4 % en los nuevos casos den los últimos siete días y una tasa de positividad de las PCR del 4 %”, dijo el ministro chileno de Salud, Enrique Paris, quien mostró sin embargo su preocupación por las norteñas Arica, Tarapacá y Atacama, así como O’Higgins (centro)