Un nuevo escándalo vuelve a remecer el Ministerio Público. Un informe del semanario Hildebrant en sus Trece, reveló documentos que demostrarían los vínculos de la fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, con personajes ligados a la organización criminal «Los Cuellos Blancos del Puerto».
La fiscal Rocío Sánchez habría descubierto presuntas vinculaciones entre el exmiembro de la extinto Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), José Luis Cavassa Roncalla, investigado por integrar de red de los Cuellos Blancos, con la fiscal de la Nación Zoraida Ávalos y un miembro actual del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), Jorge Armando Rodríguez Vélez.
Sánchez también investigaba un registro de llamadas telefónicas entre Cavassa y algunos personajes importantes del sistema de justicia, como la presidenta de la Corte Suprema Elvia Barrios Alvarado y la propia titular del Ministerio Público.
Rocío Sánchez recogió declaraciones del expresidente del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), el exfiscal superior Máximo Herrera Bonilla, reveló que fue testigo presencial de una reunión en la que Cavassa Roncalla se jactó de haber ayudado a Zoraida Ávalos a obtener la plaza de fiscal suprema a través de sus influencias en el CNM.
Ávalos y otros cinco postulantes no alcanzaron el puntaje requerido en la evaluación curricular; sin embargo, al final obtuvo el cargo con una de las puntuaciones más altas del proceso.
Versiones periodísticas indican que los consejeros del CNM, con Herrera a la cabeza, le subieron a Zoraida Ávalos por lo menos 17 puntos, a fin de que pudiera obtener el ascenso como fiscal suprema, justo a tiempo de la elección del nuevo Fiscal de la Nación.
Esta investigación que destaparía el mayor escándalo de corrupción en el sistema de justicia del país, le habría sido la razón para que la fiscal Sánchez sea destituida de su cargo.