Debido a la falta de agua potable, vecinos de la zona de Huaycán, en Ate, no tienen más remedio que acudir a la denominada “Playa de Huaycán” para poder lavar su ropa sin importar que el lugar sea un afluente de la planta de aguas residuales de Sedapal.
Asimismo, se aprecia que los asistentes no respetan el distanciamiento social ni cuentan con el uso de las mascarillas para evitar un posible contagio por COVID-19. Sin dejar de mencionar, el alto grado de contaminación que puede llevar a que las personas puedan contraer un gran número de bacterias que podrían ser perjudiciales para su salud.
Por otro lado, la ausencia de baños hace que las personas tengan que hacer sus necesidades detrás de los arbustos que rodean el lugar, agravando más la contaminación del lugar. Además, se debe tener en cuenta que en las aguas se puede encontrar grandes cantidades de basuras e incluso bolsas de detergente flotando debido a la falta de tachos de basura y limpieza.