La controversia persiste en Alianza Lima luego de la final perdida contra Universitario de Deportes en la Liga 1. El apagón repentino en el Estadio Matute al finalizar el partido ha generado un debate entre los miembros del Fondo Blanquiazul.
Carlos Hiraoka, representante del fondo, expresó su desacuerdo con la decisión de apagar las luces al término del encuentro. En su comunicado en redes sociales, enfatizó la necesidad de mantener la ética institucional y ejemplificar los valores de la entidad, independientemente del resultado del partido. Hiraoka instó a que las decisiones y comunicados de la administración sean coherentes y adecuados para mantener la legitimidad.
Asimismo, propuso convocar una junta general de acreedores, considerando la situación actual en Alianza Lima como una manera de dar inicio a un proyecto claro y concreto para el año 2024.
Por su parte, Alianza Lima defendió la acción de apagar las luces, argumentando que esta medida se tomó con la intención de asegurar una evacuación rápida y preservar la integridad y seguridad de los espectadores y las delegaciones deportivas. El club aseguró que se contó con el respaldo de la Policía Nacional para garantizar una salida segura, apagando solo los reflectores del campo de juego.
Estos acontecimientos han generado una división en las interpretaciones sobre la acción, con opiniones divergentes respecto a la gestión de la situación tras la finalización del encuentro.
