El debate en torno a la eutanasia se intensifica tras el caso de Ana Estrada, quien optó por dicho procedimiento el pasado domingo 21 de abril. En este contexto, el sacerdote diocesano Omar Sánchez se ha pronunciado en contra de la eutanasia, calificándola como un pecado mortal y una transgresión a la ley.
En una entrevista con Exitosa, Sánchez expresó su firme rechazo hacia la eutanasia, señalando que va en contra de las enseñanzas de la Iglesia Católica y del Código Penal del país. El sacerdote enfatizó que la legislación vigente en materia de eutanasia está respaldada por la Constitución, por lo que cualquier intervención de este tipo constituiría una vulneración de la ley.
«Creo que se ha transgredido la ley, porque hay una ley muy clara en el Código Penal sobre este tema y unas leyes inferiores no pueden estar sobre una ley superior que, además, está respaldada por la Constitución», afirmó Sánchez durante el programa «Informamos y Opinamos con Karina Novoa».
Desde una perspectiva teológica, el sacerdote considera que la eutanasia es equiparable a un acto de suicidio, constituyendo así un pecado mortal. Aunque respeta las decisiones individuales, Omar Sánchez enfatizó su preocupación por la pérdida del sentido de la vida y el riesgo de que situaciones similares se reproduzcan en el futuro, especialmente entre jóvenes que enfrentan cuadros de depresión.
«Se abre la puerta a algo muy peligroso que ya sucede en todo el mundo. Llegan a cometer suicidio asistido o eutanasia, como lo quieran llamar, jóvenes de 15 a 17 años porque se sienten deprimidos en países como Holanda, Dinamarca o Suecia. (…) Creo que hemos perdido el concepto del valor de la vida, incluso en una vida que sufre», expresó el sacerdote.
La postura de Omar Sánchez refleja el profundo debate ético y moral que rodea a la eutanasia, y destaca las tensiones entre las creencias religiosas y las legislaciones civiles en temas relacionados con el final de la vida.